Nuevas normas en Chile para permitir ingreso a Venezolanos

Las autoridades Chilenas establecieron la exigencia de una visa consular para aquellos ciudadanos venezolanos que quieran ingresar como turistas al país, la información la dio a conocer  Rodrigo Ubilla, subsecretario del Interior, las declaraciones las ofreció el funcionario al  diario ‘El Mercurio’, indicando que el objetivo de esta nueva medida es  “ordenar la casa”.

Hasta ahora, los venezolanos que ingresaban como turistas a Chile no necesitaban pedir ese documento, uno de los factores que permitió su masiva llegada al país en los últimos años.

Pero el decreto del Ministerio del Interior establece, “como requisito para el ingreso al país con fines de recreo, deportivos, religiosos u otros similares, la obtención del ‘visto consular de turismo simple’ como un derecho de ingreso y permanencia en Chile en tal calidad”.

La visa de turista, por máximo 90 días, también podrá ser solicitada en representaciones diplomáticas en cualquier país del mundo. El documento, que permite a los inmigrantes buscar trabajo legalmente en Chile apenas lleguen, se extiende por un año, es prorrogable por el mismo período y es distinto de la visa de residencia definitiva.

En 2018, el presidente Sebastián Piñera implementó una visa de responsabilidad democrática para los venezolanos que quieran llegar a Chile legalmente. Hasta mayo se habían entregado 37.000 de estos permisos.

Según datos oficiales, mas de 300.000 venezolanos han llegado a Chile desde hace al menos tres años, convirtiendo este país en su tercer destino –detrás de Colombia y Perú–.

La ONU ha solicitado mantener las fronteras abiertas para los venezolanos que dejan su país, preocupada porque algunos gobiernos imitaran a Perú, que impuso el requisito de un visado humanitario para permitirles entrar a su territorio.

Según la organización, preocupa que medidas como la de Perú –y, ahora, la de Chile– causen una situación de “embotellamiento” en países como Colombia y Ecuador. De hecho, esta semana, unos 200 venezolanos quedaron varados en la frontera entre Chile y Perú, esperando poder ingresar a territorio chileno tras el cambio de normativa.