GlobalizateRadio.- Para conseguir incrementar la distribución de ayuda a quienes las necesitan, se necesita fletar barcos y aviones, y proporcionar trabajadores sanitarios. Sin estos y otros servicios logísticos la respuesta mundial podría paralizarse en un momento en que no se puede detener.
El plan de respuesta humanitaria que lanzó el Secretario General de las Naciones Unidas el pasado 25 de marzo por un valor de 2000 millones de dólares con el objetivo de impulsar la respuesta global de emergencia al coronavirus COVID-19 en algunos de los países más vulnerables del mundo, ya ha conseguido recaudar 550 millones, pero necesita con urgencia 350 millones más.
Una carta abierta a la comunidad de donantes los responsables de los principales organismos de las Naciones Unidas recuerdan que con la pandemia del coronavirus la humanidad se enfrenta a su desafío más importante desde la Segunda Guerra Mundial.
Asimismo, destacan que la dispersión de la enfermedad no reconoce fronteras, que no perdona a ningún país y que una posible vacuna podría no llegar hasta dentro de un año.
“En esta carrera contra un enemigo invisible, todos los países deben contraatacar, pero no todos comienzan desde la misma línea de salida. En las naciones en las que los más vulnerables del mundo necesitan ayuda y suministros humanitarios para combatir la pandemia, los vuelos cancelados y las rutas de suministro interrumpidas se ven afectados de manera desproporcionada”, afirman.
Los jefes de los principales organismos de la ONU calificaron de “rápida” y “generosa” la aportación de 550 millones de dólares recibida hasta la fecha que permitió socorrer a quienes estaban atrapados en la guerra, la pobreza y los peores efectos del cambio climático, “especialmente en un momento en que sus propias poblaciones están sufriendo las consecuencias del virus”.
A este monto, se le han de añadir los 95 millones de dólares que ha liberado hasta el momento el Fondo Central para la Acción en Casos de Emergencia (CERF) el fondo humanitario establecido por la Asamblea General de las Naciones Unida el año 2006 cuyo objetivo es “prestar una asistencia humanitaria más eficaz y fiable a las personas afectadas por desastres naturales y conflictos armados”.
Sin embargo, los expertos de la ONU opinan que ante esta situación “se necesita hacer más”.