Globalizateradio.- Santiago de Chile.- Raúl Semprún vía @Cronicasdechile
Ver a un nacional Haitiano vviendo en Chile, cantando “gaita zuliana” causa asombro y la vez gracia, pero además de esto, cierto coletazo de orgullo. Este tipo de experiencias tiene su explicación sociológica según manifiesta Tomás Páez autor de la Voz de la diaspora venezolana.
El sociólogo habla del impacto de las comunidades de nacionales venezolanos inmigrantes en el extranjero y enfatiza sobre la instalación de una “Nueva Geografía” que se ancla en el exterior mas allá de los límites geográficos de los 24 estados del país de origen.
Expresa Páez, que observa en videos en muchas partes del mundo a extranjeros anfitriones fascinados por la “Arepa” “El Pabellón y las Friticas ” por ejemplo, y con lexicos y costumbres implantadas por los criollos venezolanos que conforman la diáspora.
Esto sucede con mayor fuerza en comunidades, pueblos y ciudades de paises como Chile, Colombia, Ecuador, Perú, Argentina, Brasil, República Dominicana, Mexico, Panamá, Costa Rica, Estados unidos, España y las Islas del Caribe.
“Tenemos más claridad de identidad al comparar sociedades como la ecuatorianas, peruanas y Chilenas, mas tímidas. Los rasgos caribeños sobresalen” Aasegura Heberto Delgado, del Centro Gumilla, al referirse al impacto que causan los coterráneos.
Jovialidad y energía vital, más valores con los que históricamente se relaciona al nacional de Venezuela, al que se suma la solidaridad, ingenio, cordialidad,y buen sentido del humor, todo se converge y calan.
Agregan los analistas, el hecho que un Dominicano hable y gesticule como un “Maracucho” nacido en Maracaibo estado Zulia, tras laboral con 4 de ellos por varios años, en Santiago de Chile es también un fenómeno creciente.
Estas vivencias, muestran mezclas de experiencias humanas que revelan prácticas interculturales interesantes y dignas de analizar a la mirada de los objetivos que implica ver al migrante como un factor de desarrollo.
Cortesias: @chamosenelmundo @cronicasenchile