GlobalizateRadio.-Baku – Los tapabocas para asepsia, junto al papel higiénico y el sanitizante de manos son el emblema en la era de la COVID-19.
La pandemia del coronavirus ha llevado a un faltante de equipo de protección personal en Azerbaiyán, en donde el problema se ha visto exacerbado por bandas criminales que se llevan grandes cantidades de tapabocas fuera de este país ubicado al sur del Cáucaso.
Ahora un grupo de víctimas de trata de un albergue que recibe el apoyo de la OIM, ha tomado la iniciativa de comenzar a producir tapabocas para ellos y para la comunidad local de la zona de Baku, la capital.
Usando trozos de paño y otros materiales, además de las máquinas de coser entregadas por la OIM y por USAID, estos voluntarios ya han podido producir cientos de tapabocas de fabricación casera que le están enviando a los proveedores de servicios esenciales en sus vecindarios.
Mehriban Zeynalova, encargada del albergue Temiz Dunya (Mundo Limpio) dijo: “A algunos de nuestros residentes les hemos enseñado a coser y están participando en esta respuesta humanitaria partiendo de la base del principio hacer lo que se pueda con lo que uno tiene”.
Agregó que son totalmente conscientes de que los tapabocas caseros no tienen la misma calidad que los que se usan en el ámbito de la sanidad. “Estamos trabajando partiendo de la base de que contar con un barbijo casero es mejor que no tener nada. Con los materiales adecuados podemos hacer mucho más”, dijo.
El Dr. Jaime Calderón, Consejero en Salud de Rango Superior de la Oficina Regional de la OIM en Viena aplaudió la iniciativa, pero les pidió que sean precavidos. “El Centro para el Control de Enfermedades de los EE.UU. dice que en aquellos lugares en los que no se puedan conseguir tapabocas médicos, el personal de la salud debe usar al menos tapabocas caseros, incluso bufandas o pañuelos como último recurso para atender a los pacientes afectados por la COVID-19. Lo ideal sería que los tapabocas de fabricación casera se usen con un escudo para el rostro que cubra todo el frente (y que llegue hasta el mentón e incluso más abajo) y a ambos lados de la cara”.
La OIM Azerbaiyán ha estado implementando proyectos de lucha contra la trata de personas desde 2015 los cuales apuntan a mejorar las condiciones de vida y apoyar las iniciativas comerciales de los residentes en albergues mediante la provisión de capacitaciones, equipamiento y materiales para sus emprendimientos.